Mi historia de amor con la fotografía: de una cámara oscura a un sueño hecho realidad

Todo comenzó en el bachillerato, cuando mi profesor nos asignó un experimento con una cámara oscura. Era una simple caja de cartón, pintada de negro por dentro, con un pequeño agujero que servía como lente. El objetivo era crear imágenes básicas, pero fascinantes.

El proceso era todo un desafío: en total oscuridad, debía colocar un papel fotográfico dentro de la caja, guiándome únicamente por el tacto. Después, salía al aire libre, abría el agujero durante unos 30 segundos y regresaba al cuarto oscuro para revelar la imagen. El "cuarto oscuro", por cierto, era un baño sin ventanas que convertimos en laboratorio improvisado con cinta adhesiva y bolsas negras. Esa experiencia despertó algo en mí: una mezcla de curiosidad, creatividad y el deseo de capturar momentos únicos.

Con el tiempo, quise llevar mi afición más allá. Construí un cuarto oscuro más sofisticado, equipado con todo lo necesario para revelar negativos en blanco y negro. Conseguí una ampliadora desde Estados Unidos y la hice llegar a Colombia por correo. Pasaba horas experimentando con bandejas, líquidos especiales y papel fotográfico. El blanco y negro siempre tuvo un encanto especial para mí.

Cuando llegué a la universidad, mi pasión por la fotografía creció aún más. Allí tuve acceso a laboratorios bien equipados y pude explorar técnicas como la doble exposición y las largas exposiciones. Recuerdo cómo me fascinaba capturar las luces de los carros en movimiento o lograr que una persona apareciera varias veces en una sola foto, en diferentes posiciones. Cada experimento era una oportunidad para aprender algo nuevo y explorar mi creatividad.

Con el tiempo, me di cuenta de que quería más que solo un pasatiempo. La idea de convertir mi pasión en mi profesión empezó a tomar forma. Decidí apostar por este sueño y trabajar para que la fotografía no solo fuera mi arte, sino también mi forma de vida.

Hoy, tengo la suerte de dedicarme a lo que amo, capturando historias a través de mi lente. Si también estás interesado en la fotografía o buscas un fotógrafo para inmortalizar tus momentos especiales, te invito a explorar mi página web. Allí encontrarás ejemplos de mi trabajo y los servicios que ofrezco.

La fotografía no es solo una imagen; es una forma de preservar emociones, contar historias y conectar con el mundo. ¿Cuál es tu historia? ¡Me encantaría capturarla!

Doble exposición